DOCUMENTO: “PRINCIPIOS DEL ABSOLUTISMO REAL” “El estado de la monarquía es la cosa suprema que existe sobre la faz de la Tierra, porque los reyes no son sólo lugartenientes de Dios sobre la tierra y se sientan sobre el trono de Dios, sino que aún el propio Dios los llama dioses. Las órdenes del Rey deben ser obedecidas, salvo que se opongan del todo a los mandamientos divinos. Hay que respetar al Rey como al juez instituido por Dios que sólo responde ante Dios cuando dicta sentencia y responde de su sentencia. Hay que temer al rey como a un vengador, amarlo como a un padre, rezar por él como por su patrón, cuando es bueno para que prosiga así, y cuando es malo para que recapacite. Sus órdenes deben ser ejecutadas inmediatamente; en el caso que sean injustas, hay que huir ante su ira y sólo hay que resistir con plegarias y suspiros. Se debe implorar ayuda de Dios, conforme a los sufrimientos de la primera iglesia; las armas de la iglesia son las oraciones y las lágrimas… Si ...